Uno de los trabajos más habituales que nos encontramos en edificios antiguos como comunidades de vecinos u oficinas, es el cambio de las bajantes de fibrocemento o uralita. Se trata de estructuras que sufren fácilmente fisuras, atranques y roturas con el paso de los años, y llega un momento en el que renovarlos e instalar bajantes con materiales como PVC, entre otros, se convierte en prioritario.
Hay que tener en cuenta, que todas aquellas bajantes de fibrocemento que se fabricaban antiguamente, presentan un verdadero peligro para la salud al tratarse de un material altamente tóxico. Por eso, hacer este tipo de trabajos debe quedar siempre en manos de profesionales especializados.
¿Cuándo hay que cambiar los bajantes de fibrocemento?
En caso de pérdidas o fugas, es necesario ponerse manos a la obra y solucionar el problema, puesto que las fugas de agua se filtran por las paredes, pueden crear humedades, dañar la fachada, y, además, el agua está contaminada por el fibrocemento. Estamos así ante una reforma estructural que la mayoría de comunidades de vecinos se ve obligada a realizar en algún momento. ¿En qué casos es obligatorio hacerlo?
Según la normativa, en caso de haber una avería en la bajante de uralita, está prohibido repararla si no se trata de una empresa especializada que pueda tomar todas las medidas preventivas para hacer este trabajo tan complicado. No solo eso, sino que las bajantes de fibrocemento pueden dar servicio al edificio solamente hasta el final de su vida útil. La vida útil de este material está marcada en unos 20 años. Una vez superado este tiempo, las bajantes deben ser sustituidas por otras de materiales menos tóxicos.
En Loga Rehabilitaciones, contamos con todos los medios humanos y técnicos necesarios para la ejecución de trabajos con riesgo por amianto, y somos especialistas en la sustitución de bajantes de fibrocemento. Actuamos de forma eficaz y segura y ofrecemos una rápida sustitución de las antiguas canalizaciones por unas nuevas con materiales adecuados.