Las filtraciones de agua pueden causar graves problemas estructurales que acortan la vida útil del edificio. Además, también producen un terrible efecto estético (manchas), por no hablar de la escasa eficiencia energética que provocan. Para evitarlo y ahorrar costes en futuras reparaciones, hemos de contar con la mano experta y recomendaciones de los especialistas en impermeabilización de edificios.
Y es que solo los profesionales saben prevenir la entrada de agua y humedad en los edificios, pero también determinan las causas para aislar correctamente la edificación, ya sea sellando grietas o aplicando pinturas al silicato, morteros de restauración, etc.
Estos trabajos, además, se hacen especialmente urgentes en la protección de áreas en permanente contacto con el agua como son cubiertas, azoteas o terrazas. ¿Qué fórmulas profesionales resultan imprescindibles en la impermeabilización de edificios?
Materiales que no pueden faltar en la impermeabilización de un edificio
Existen numerosas fórmulas para impermeabilizar edificaciones, tanto en interior como en exterior. Pero decantarse por una o por otra depende fundamentalmente de dónde se va a aplicar el producto. En este sentido, podemos encontrar:
Impermeabilizantes sintéticos
Resinas poliméricas, poliuretano, telas asfálticas, acrílicas, resina epoxi… Estas soluciones presentan una alta resistencia a la intemperie y una gran durabilidad y flexibilidad. Por ejemplo:
- El poliuretano (PU) se impone en algunos trabajos frente a tela asfáltica porque además de ser muy resistente y de larga vida útil, su instalación es de lo más sencilla gracias a su ligereza y poco peso.
- Las láminas bituminosas presentan distintos grosores y calidades. Son telas sintéticas impregnadas de asfalto (tela asfáltica), y resultan útiles en la impermeabilización de suelos, terrazas y balcones. No obstante, actualmente se están reemplazando por otros materiales porque, además de conllevar riesgos de puntos de fuga en las juntas, su vida útil disminuye ante una exposición prolongada a la radiación solar.
- La resina epoxi es muy utilizada para impermeabilizar suelos en áreas industriales. Tiene un potente efecto anti-humedad, y resiste el roce y los agentes químicos utilizados para su limpieza.
Impermeabilizantes pétreos
Estos se utilizan para cubrir, proteger y construir tejados. En esta categoría podemos encontrar diferentes materiales:
- Pizarra y granito: cuentan con una vida de 50 años y apenas requieren mantenimiento.
- Silicona. Proveniente de la sílice, en estado líquido funciona como un extraordinario material impermeabilizante, con una duración de 3 años.
- Gres cerámicos y porcelana. Estos materiales son sometidos a altas temperaturas para vitrificar integralmente la arena de cuarzo. Como resultado, se obtienen productos impermeables de mayor dureza y duración.
- Materiales cementosos: impermeabilizantes como el fibrocemento presentan una excelente compatibilidad y adherencia con elementos de concreto (vinculación de estructuras) o mortero. Poseen propiedades elásticas de impermeabilización sobre superficies tanto verticales como horizontales con movimiento. Soportan contacto eventual o constante con agua.
Con todo, la lista de impermeabilizantes que podemos encontrar en el mercado es mucho más amplia. Algunos ejemplos son los impermeabilizantes naturales como el clorocaucho o el EPDM, así como los metálicos (cobre, zinc o aluminio), aunque están en desuso.